Bizcocho de castañas y chocolate relleno de cheesecake de limón

¡Buenos días!

Me encantan las castañas; están muy buenas, se comen en otoño y te quitan el frío... Pero ODIO pelarlas.

Para hacer la crema de castañas de esta receta, casi me dejo las uñas de los pulgares para pelarlas. ¡Y me siguen doliendo las uñas!

Pero merece la pena el dolor para poder saborear este rico sabor. Y además, esta receta es la 2º que publico para en concurso del blog de Cookcakes de Ainhoa. Ya que su apartado del invitado del mes cumple un año. Mi primera receta fue unas barritas de mantequilla de cacahuete y oreo. Que os SÚPER recomiendo.

Esta vez he preparado la receta de la tarta de castañas del blog Corazón de caramelo. Que he de admitir que está espectacular. Y el puré de castañas por sí solo está alucinante. Pero para hacerlo un poco diferente le he añadido un poco de cheesecake de limón en el interior, que está delicioso. Me encanta esta receta de cheesecake de limón, que he sacado de la receta de Mini cheesecakes de limón del blog de Alma Obregón.
 

BIZCOCHO DE CASTAÑAS Y CHOCOLATE RELLENO DE CHEESECAKE DE LIMÓN
(Receta del blog Corazón de Caramelo, que he rellenado de cheesecake de limón)

Para el puré de castañas:

• 500 gr. de castañas 
• 50 gr. de azúcar moreno 
• 150 ml. de leche entera 
• 1/4 de cucharadita de sal 

Para el bizcocho:

• 500 gr. de puré de castañas 
• 3 huevos 
• 150 gr. de chocolate 70% 
• 100 gr. de mantequilla 
• 20 gr. de harina 
• 100 gr. de azúcar 

Para el relleno de queso:

• 250g de queso crema, a temperatura ambiente
• 70g de azúcar
• 1 huevo
• 1/2 cucharadita de aroma de limón 
• 63ml de nata para montar 

Empezamos preparando el puré de castañas y para ello lavamos bien las castañas y las secamos con un trapo. Con un cuchillo les haremos un corte en la cáscara de aproximadamente 1,5 cm., desde la parte más ancha hasta el pico de la castaña. Las echamos en una cacerola y las cubrimos con agua. Las ponemos al fuego hasta que el agua rompa a hervir y a partir de ese momento contaremos 20 minutos. Retiramos la cacerola del fuego y dejamos que se temple un poco (pero solo un poco porque las castañas se pelan bien cuando están aún calientes, de lo contrario te iba a costar muchísimo retirarles la piel). Vamos sacando las castañas de una en una para que no se enfríen y las vamos pelando. Cuando tengamos todas nuestras castañas peladas, las colocamos de nuevo en una cacerola y añadimos 150 ml de leche, el azúcar moreno y la sal y dejamos que se ablanden a fuego lento, aproximadamente durante 30 minutos. Tritura la mezcla hasta conseguir un puré. Si observas que ha quedado demasiado seca la mezcla, añádele un chorrito más de leche mientras las estás batiendo.

Precalentamos el horno a 180º C. Y engrasamos un molde rectangular con spray desmoldante y reservamos.
Mezclamos el puré de castañas con los huevos el azúcar y la harina. Batimos hasta que se integren todos los ingredientes.
En un cazo y a fuego medio derretimos la mantequilla junto con el chocolate y mezclamos bien hasta obtener una crema lisa y brillante.
Añadimos la mezcla de mantequilla y chocolate a la mezcla anterior de huevos, castañas, azúcar y harina y batimos bien hasta obtener una mezcla homogénea.
Para el cheesecake:
Batimos a velocidad BAJA el queso con el azúcar blanco. Incorporamos los huevos, uno a uno, LENTAMENTE hasta que estén bien integrados. Añadimos la nata y finalmente el extracto de limón.

Vertemos la mitad de la mezcla de castañas/chocolate en el molde, encima la mezcla de cheesecake (nos reservamos unas cucharadas para poner por encima para la decoración) sin llegar a los bordes; encima el resto de la masa de castañas/chocolate y encima las cucharadas del resto del cheesecake. Con una brocheta hacemos ondulaciones para mezclar las dos masas y decorar. Golpeamos en molde contra la mesa para que se vayan las burbujas de aire que puedan quedar entre las dos capas.
Introducimos en el horno durante 45-55 minutos o hasta que al pinchar con un palillo en el centro, éste salga limpio. Observarás además que la corteza exterior está ligeramente crujiente.
Lo sacamos del horno y dejamos que se enfríe, metemos en la nevera unas horas para poder desmoldar.

¡Que aproveche!

Mil abrazos.

Caro.